domingo, 9 de febrero de 2014

BREVE INSTANTE




¿Has comprobado alguna vez, la inmensa y extraña sensación
que produce una relajada siesta de verano?


Me ha sorprendido esta tarde la siesta, así literalmente hablando, entorné un instante los ojos sin pretender desde luego cerrarlos del todo y una sensación de paz y bienestar se ha ido ligeramente  de ellos apoderando.
Un descanso justificado que ha transitado velozmente y a toda prisa, un instante escueto y aturdido donde todo puede suceder, mientras la mente lo admita, aún así permanece en trance con las continuas obligaciones del día.
De improviso se han ido incorporando al sueño, la col, el apio, los puerros, las carlotas y las chirivías, todo un estupendo y magnifico caldo de verduras que reposa placidamente sobre el silencioso mármol de la cocina.
Intento atar los cabos sueltos, pero no consigo descifrar ni la hora ni el día, algo me ha  pasado ligeramente como rozando, voy sintiendo las piernas despiertas pero la mente permanece todavía dormida.
No recuerdo haber hecho el supermercado, ni tampoco me viene a la memoria haber ido a la panadería ¡no ha sonado esta mañana el despertador!... la ropa tampoco la tengo tendida, ni siquiera recuerdo haber tomado la tostada con miel, ni el agradable aroma del café flotando por las cortinas, el frigorífico está por ordenar, tengo pendiente hacer arroz con leche y ensaladilla, una ensalada fresca con bocas de mar, limpiar lenguados, boquerones y pescadilla.
El cerebro como acorchado intenta relajarse de la estresada actividad continua.
¡De pronto alguien ha exclamado !a quién le apetece limonada… ¡está fresca y exquisita!
Con el agitador sonido sobre la jarra de cristal, consigo por fin despejarme del acelerado, confundido y estresado sueño.
Es Agosto, es verano… y probablemente esta precipitada y breve siesta la recuerde durante gran parte del año.
                                 

Pilar
Contreras Moreno
©

 



16 comentarios:

  1. Jolín Pilar, muy relajada la siesta no ha sido. Al principio sí; cuando cierras los ojos y te dejas llevar por ese estado de bien estar y relajación es genial, pero (y es cierto) esa parte del cerebro que continúa maquinando y laborando ¡qué puñetera!
    Claro que, pensándolo bien, comprendo que se recuerde durante el año, cuando quizá no exista ni ese pequeño momento en el que poder descansar el cuerpo.

    Besitos y que pases un buen domingo!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jajaja... Hola Ana soy demasiado activa para dormir la siesta, pero en vacaciones se intenta, la mente!!! esa poderosa maquinita..
      Gracias por tu visita guapisima
      Besos

      Eliminar
  2. Pilar, qué bueno cuando la mente se queda quieta...y deja descansar al cuerpo y al alma...Es un momento feliz, intenso e inolvidable, como has explicado, amiga...Pero, la mente nos sigue recordando el movimiento, la responsabilidad...el ajetreo de la vida. La mente nos mueve y nos dirige, y de vez en cuando debemos olvidarnos de ella, dar prioridad al corazón...o quedarnos dormidos, tocando el descanso y la paz, que son muy necesarios.
    Mi felicitación y mi abrazo grande por tu bello y sentido post, compañera y amiga.
    Feliz domingo, Pilar.
    M.Jesús

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Otro abrazo para ti .Mª Jesús, pero es cierto cuando no se tiene costumbre de dormir a ciertas horas, el mismo reposo te crea una extraña inquietud.
      Feliz semana, querida amiga.

      Eliminar
  3. ¡Qué bien sienta esa siesta de verano, mitad sueño, mitad letargo!
    La tuya además fue provechosa pues hasta te dio tiempo de hacer un caldo
    Un abrazo amiga poeta

    ResponderEliminar
  4. Amiga Julia, las amas de casa dormimos con la casa a cuestas!!! jajaja y con el tiempo bien aprovechado.
    Un besazo, con cariño
    Pilar

    ResponderEliminar
  5. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  6. Y es que no hay nada como una buena siesta cuando el calor es agobiante, eso en mi tierra se sabe bien, lo malo es que las que somos activas no la aprovechamos jajja porque el coco sigue en función y nos levantamos con una jornada de trabajo.Muy buen post Pilar,besines guapa

    ResponderEliminar
  7. Siempre es bueno dejar que la mente se libere y el cuerpo descanse, es una manera saludable de recuperar fuerzas, ya sea en verano o el resto del año.
    besos

    ResponderEliminar
  8. Muy bueno Pilar!. La verdad que en un día lluvioso como el de hoy apetece acordarse de esos ratos en los que una se puede trasponer en verano.


    Mil besos

    ResponderEliminar
  9. Hola Pilar! viene muy bien un pequeño descanso aunque no se duerma porque siempre tenemos mil cosas en la cabeza, pero relaja, Un abrazo

    ResponderEliminar
  10. Fíjate que placentero momento y aún así, la mente en sus batiburrillos incansables.
    A pesar de todo, que maravilla es el momento de sentir esa relajación distinta fuera y dentro a la vez.
    Besos.

    ResponderEliminar
  11. No me gustan las siestas, Pilar, porque hago mucha pereza para levantarme de ellas.Pero sí, de vez en cuando me quedo dormida en el sillón después de comer, y la verdad es que esas pequeñas "cabezadas"...¡me saben a gloria!.
    Un cálido y cariñoso abrazo, amiga.
    Rosi

    ResponderEliminar
  12. Hasta en los momentos de descanso la mente no deja de navegar por los quehaceres diarios. Inevitable, la mente no descansa.

    Besos

    ResponderEliminar
  13. Hola Pilar, yo necesito esos 20 minutos de desconexión con la realidad, y me sienta muy bien. Un estupendo "Breve instante" que nos compartes. Tengo mi Blog en descanso, pues hay en proyecto conciertos y actuaciones con mi Orfeón. Vendré a saludarte y disfrutar del tuyo.
    Un abrazo grande.
    mara

    ResponderEliminar
  14. Muchas gracias a tod@s en general por vuestra amistad, visitas y comentarios.

    Mara no te preocupes por tener el blog en descanso, a veces es preciso y necesario. Lo que verdaderamente importa es tener proyectos y si aparte es con tú Orfeón pues ya es suficiente, seguro que la música será tu fuente de inspiración.
    Feliz fin de semana.

    ResponderEliminar