En realidad, no recuerdo
la estación exacta del año,
como si un alud de nieve
se hubiese convertido en agua
tras el tórrido calor del verano.
El tic-tac de las horas
unido a la materia
componía estribillos
de luz y de cadencia.
El papel de seda
y el pliego de calco,
formaban festones
vainicas y letargos.
Sobre la mesa camilla…
se apilaban las cenefas,
el metro y las tijeras
bocetos con flores secas.
En la pulcritud de la tela
quedaban inscritas
diminutas letras.
La vida estaba por venir
el futuro estaba por llegar.
©Pilar Contreras Moreno
hols Pilar dejame borde al borde de tus palabras mi enhorabuena por estos versos de oro donde el presente se haceovillo de seda para preservar su futuro ...ha sido uh placer leerte y aprovecho para desarte felices fiestas y venturoso año nuevo . jr.
ResponderEliminarUn lindo poema Pilar... Viene a la memoria el momento más importante de la vida de una mujer ... anuncias la llegada de un (tu) bebé? y tú grabando en diminutas letras el nombre de la amada extensión de tu Ser. Veo que has dejado de escribir, yo me ausenté por 2 años, estoy volviendo.
ResponderEliminarSabes acaso si esta bien el gran poeta Antonio Porpetta? Un gran abrazo