Cuando
cierras detrás de ti una puerta…
sin
querer algo se queda atrapado dentro
quizás la
ilusión perdida
o la visión frustrada del amor eterno.
La
nostalgia o el vacío
pinceladas
que nos delatan
las horas
y los minutos
de
instantes que se desgastan.
Fracciones
mínimas de segundos
adquieren
improvisadas formas
como un
conjuro maléfico
que
provoca cierta congoja.
Suele
destruir el tiempo
a veces
cosas bellas y hermosas
nada es
para siempre…
todo
cambia y se transforma.
El
universo es amplio y está repleto…
de almas
gemelas y bondadosas.
©Pilar
Contreras Moreno
Me gustó
ResponderEliminarleerte, un beso.
Un enorme placer siempre recibirte, abrazos Amapola!!!
EliminarY qué difícil es a veces cerrar esas puertas.
ResponderEliminarQue bonitas palabras para describir una situación que nos complica tanto la vida.
Mil besos
Lo bueno Encarni es que de todas las situaciones se aprende.
ResponderEliminarNos vemos en un plis!! Besotes. :)
A veces es necesario cerrar ciclos para poder iniciar otros con más vigor y estimulo.
ResponderEliminarBesos
No lo pongo en duda IIesin, de todo aprendemos constantemente.
EliminarUn abrazo de luz
Pilar, cuánto nos cuesta cerrar ciclos, nos apegamos a las cosas, a la costumbre y a las personas y a veces debemos dejar ir, o bien cambiar nuestro propio camino...Hay un refrán que dice:No hay mal que por bien no venga...Y tiene mucha razón, todo es un aprendizaje y nuevas oportunidades...Mi felicitación por tu mirada profunda y mi abrazo de luz, amiga.
ResponderEliminarM.Jesús
Muchas gracias Mª Jesús el ser humano desde luego jamás dejamos de aprender
ResponderEliminarUn abrazo inmenso.
Qué belleza de poema. Encierra verdades que quedan atrapadas en el tiempo. Todo pasa y todo queda. Me encanta, Pilar.
ResponderEliminarGracias querida Marisol por dejar tu preciada huella.
EliminarBesos